Una inversión significativa que representa un nuevo paso concreto en la estrategia empresarial de reducción del impacto ambiental y de las emisiones de CO2.
La planta, que se extiende sobre una superficie de más de 3.000 metros cuadrados, es testimonio del constante compromiso de New Box con la innovación sostenible y la protección del medio ambiente. Esta iniciativa forma parte de un programa más amplio de transformación verde que involucra a toda la cadena de producción de la empresa, desde la elección de las materias primas hasta los procesos de fabricación y distribución.
"La puesta en marcha de esta planta fotovoltaica es solo una de las numerosas iniciativas que New Box está implementando para reducir su huella de carbono", comenta la dirección de la empresa. "Nuestro objetivo es ser protagonistas activos en la transición ecológica del sector, demostrando que es posible combinar la excelencia productiva y el respeto por el medio ambiente".
Así, New Box confirma su papel como innovador y líder en cuestiones ambientales, anticipándose a los futuros desafíos del mercado y respondiendo a las crecientes expectativas de clientes y partes interesadas en términos de sostenibilidad.